¡HOY! … ¡HE
VISTO A MI
AMOR LLORAR!
¡Hoy! …
¡He visto a
mi amor llorar!
Llorar sobre
un diván de
metal,
metal tan frágil para relatar
lo que para
ella fue un día
fatal.
¡Hoy! … ¡He
visto
a mi amor llorar!
Llorar
desde lo íntimo de su alma,
hasta quemar
mi propio paladar
al
escuchar su triste realidad.
¡Hoy! … ¡He visto a mi amor llorar!
Hasta
morder la pintura de sus labios,
que un día
se cerraron por no gritar
ni escuchar aquellos gemidos sabios.
¡Hoy! … ¡He visto a mi amor llorar!
recordando
el abuso de los hombres,
que a
la mujer
no saben valorar
gozando
con sus fechorías sin nombres.
¡Hoy! … ¡He visto a mi
amor llorar!
Llorar y desahogar su frustración,
con aquella
fuerza y valentía sin par
supo vencer a esta funesta tentación.
¡Hoy! … ¡He visto a mi amor
llorar!
y
desinhibirse por su propia voluntad,
hasta
cerrar sus labios y aun callar
junto al hombre
de su felicidad.
GERALDY
J-10-5-1997
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