¿LOS SUEÑOS? ¡SUEÑOS SON!
Anoche tuve un sueño
y mientras dormía soñé,
que comía y comía
una naranjita
de Huando
y, ¿Cómo no tenía pepita?
¡Qué exquisita
la probé!
También la comió mamita
y mi hermanita Hermila,
porque era de la
chacrita
de la tía Petronila.
De pronto
llegó mi primita
a
quien también le convidé,
pero como
era
lloroncita
muy poco le agradó.
Luego disfrutó de este banquetito
mi vecino el
niño Juliancito,
pero como era tan
pequeñito
pues casi, casi se ahogó.
Mamita se asustó
de pronto al suelo cayó,
pero, luego, llegó papá
y cogió la sabrosa naranjita
y al primer mordisco que le dio.
¡De emoción
y alegría saltó!
Pero cuán grande
fue la sorpresa
que al
despertar. ¡Todos quisimos
seguir comiendo la rica naranjita!
Sin embargo, como esto había
sido un sueño,
la naranjita
había desaparecido;
cumpliéndose así el viejo adagio que dice:
¿LOS SUEÑOS? . .
. ¡SUEÑOS SON!
GERALDY
J-15-10-2007
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